El presidente Alberto Fernández advirtió este martes 9 de febrero que hay que prestarle menos atención a "los profetas del odio", en alusión a un sector de la oposición, en especial, a Juntos por el Cambio. "Hace 20 días yo era un envenenador serial y ahora me piden veneno para todos los argentinos", dijo sobre la vacuna Sputnik y la denuncia de la ex diputada Elisa Carrió. También resaltó que la misma actitud tiene ese espacio con el conflicto con el campo.

"Yo digo que hay que cuidar la mesa de los argentinos y ellos leen que promovemos una pelea con el campo", aseguró. Fue durante un acto en el Noroeste argentino. Fernández se reunirá este miércoles 10 de febrero con la Mesa de Enlace, en plena tensión por una posible suba de retenciones. El presidente argentino solicitó a los dirigentes rurales que bajen los precios para el consumo interno, pero las entidades contestaron que ellos no son formadores de precios.

"Mi deber es cuidar la mesa de los argentinos. Estamos orgullosos de que el precio del maíz, de la soja, de la carne y el trigo crezcan, pero hay que producir más y exportar más. Pero tenemos que garantizar que los precios internacionales no se vuelvan en contra de los argentinos", indicó. El jefe de Estado agregó que no es posible que haya una discusión circular en torno al campo y al precio de los alimentos. "Quiero creer que vivimos en una sociedad a la que le preocupa la gente que menos tiene. ¿No nos alcanza enfrentar una pandemia que se lleva la vida de la gente para saber que algo hay que cambiar?", se preguntó.

Sobre el coronavirus, añadió que su gobierno le puso el cuerpo a la pandemia "que era algo desconocido para todos. Pero no nos apichonamos". "Nunca nos apichonamos. Pusimos el cuerpo, nuestro esfuerzo, ante un enemigo invisible", indicó. Sobre los profetas del odio agregó: "Cuando decimos que queremos una nueva ley de biocombustibles, ellos leen que queremos terminar con los biocombustibles". "Lo que queremos nosotros es que produzcan más y den más trabajo", agregó.

Fuente: Perfil