“Quiero agradecer a todos lo medios que trataron con tanto respeto el tema de mi hijo”, dijo, recordando que “la muerte de un hijo es algo para lo que nadie está preparado y seguro muchos de la audiencia pasaron por esto, pero espero que no sean tantos”.

Después de manifestar que “es un hecho doloroso y lamentable”, expuso que “perder a un hijo de esta manera, asesinado por un cobarde con un cuchillo, es peor”. “La muerte es siempre muerte, pero él era joven con una vida por delante, este año comenzaba la Facultad en Agronomía en Corrientes y estaba lleno de vida para que lo maten así”, añadió.

Destacó y dijo que “no hay nada que criticar” del accionar policial y de la justicia que en esa misma jornada logró la detención de quien sería el asesino, un joven de 17 años de edad. “Tenemos mucha fe en la justicia y pese a que la vida de nuestro hijo no se devuelve, esperamos que se haga justicia y el asesino no quede suelto”, afirmó.

Rosbaco y su esposa participaron de una sesión del Concejo Deliberante de Monte Caseros, en la que expresaron su preocupación porque “vemos que a pesar de que se considera Ciudad, Monte Caseros todavía es un pueblo y con esto que nos pasó, nos dimos cuenta de que los jóvenes están desprotegidos”. Recordó que en esa madrugada trágica, el asesino de su hijo estuvo en el mismo sitio, agredió a otro joven y no fue detenido ni revisado por la Policía.

Contó como dato que la zona del homicidio es prácticamente céntrica y por ello “pretendemos desde el dolor, tratar de formar alguna asociación sin fines más que proteger a los adolescentes”. Recalcó que hasta el momento de la muerte de su hijo no se cuidaba a los chicos dentro y fuera de los locales bailables, no se revisaba a quienes ingresaban y la seguridad era mínima.

Lo poco que podemos hacer es devolverle a los jóvenes que nos acompañaron en la marcha y se acercan a mi casa día a día a apoyarnos, para tratar de que no vuelva a suceder”. Afirmó que “hay un montón de herramientas legales que no se cumplen porque quizás muchos miran a un lado en un pueblo como el nuestro”.

ndicó que ahora comenzaron a hacer cacheos e incrementar la seguridad en la entrada y salida de los bailes, pero “pretendemos que no sea por un par de semanas o meses hasta que se diluya, sino que sea una política de estado del municipal y policial, que sobrepase la gestión actual”. Reconoció que “miles de adolescentes salen a divertirse y dos o tres salen a matar y joden la vida de muchos y sus familias”.

Fuente: Radiosudamericana