Casi dos horas después del final de la masiva movilización por Santiago Maldonado, la Plaza de Mayo y sus alrededores se convirtieron en escenario de incidentes: un pequeño grupo de manifestantes atacó a la Policía con piedras. Las escaramuzas, que incluyeron detenidos y lesionados, se trasladaron luego a la Avenida de Mayo.

Los disturbios iniciaron frente a la Catedral y siguieron sobre Avenida de Mayo entre Bolívar y Perú. El enfrentamiento empezó cuando un grupo de manifestantes intentó derribar los vallados colocados sobre la calle Rivadavia.

Arrojaron piedras, palos y botellas, además de prender fogatas. La policía, avanzó con camiones hidrantes y gas pimientas. Dos camiones de bomberos apagaron los incendios.

Fuente: Clarín