En lo que fue su primera entrevista tras el asesinato de su esposa, Romina Aguilar, el intendente de la localidad sanluiseña de La Calera, Diego Lorenzetti, confirmó que su pareja estaba embarazada de tres meses y apuntó directamente contra sus rivales políticos. "El detonante fue mi apoyo al candidato que ganó en (la ciudad vecina) Nogolí", afirmó.

Aguilar fue interceptada el sábado por al menos dos hombres que le dispararon en el momento en que salía de su casa en una camioneta Renault Duster rumbo a la escuela en la que estaba terminando el primario. Los asesinos llegaron en una moto y abrieron fuego cuando se bajó del vehículo a cerrar el portón de su casa. Dos disparos certeros le costaron la vida.

La autopsia arrojó que tenía el vientre dilatado, pero los peritos no hallaron un feto, por lo que su condición de embarazada era una especulación, hasta que hoy lo confirmó Lorenzetti. "Hace seis, siete meses que estábamos buscando el segundo hijo. Estaba de tres meses", corroboró.


Lorenzetti no dudó en asegurar que se trató de un crimen por encargo motivado por cuestiones políticas. "Yo apoyé al candidato que ganó ampliamente en Nogolí y ese fue el detonante, ahí se complicó todo más", precisó. "Mi gestión creció muchísimo y supongo que eso a alguien no le cayó bien. Hay cosas que no puedo hablar, pero ya le di nombres a la jueza. Quiero Justicia, que caiga quien deba caer", agregó.

Ya había recibido amenazas. La última fue hace 20 días. Lo llamaron por teléfono y le dijeron que abandone el departamento de Belgrano, donde quedan La Calera y Nogolí. Pero no lo denunció. "No tomamos medidas de prevención porque pensamos que eran sólo para asustarme", admitió.

En ese marco, su mujer tenía miedo y le pidió que se fueran. "Ella no se metía en política ni iba a la municipalidad. No tenía problemas con nadie ni quería que yo me metiera en política. Somos muy devotos de San Expedito y ella decía que sigamos ayudando a la gente desde nuestro lugar, con poco, mucho o lo que tengamos. No le hice caso porque sabía que le podía dar mucho al pueblo. Y la liquidación es esta: ella se fue por culpa mía, eso no hay duda", lamentó entre lágrimas en una entrevista con TN.

El jefe comunal adelantó que se va a mudar. "Hay una familia destrozada, y una casa que me rompí el alma para comprarla y ahora la tengo que vender", finalizó.

Fuente: Infobae